La medicina integrativa combina lo mejor de la medicina convencional junto a las medicinas no convencionales validadas científicamente. Use lo mejor de cada medicamento sin exclusiones y desde el sentido común. Se trata al enfermo de forma global, no dividido por aparatos o especialidades, siempre desde la individualización, la dedicación y el tiempo de atención al paciente. 

La visión global de la medicina integrativa contempla la mente, el cuerpo y el espíritu del ser humano como un todo.

Las emociones, los pensamientos, los sucesos a lo largo de la vida impactan en el sistema nervioso central y pueden crear desequilibrios que se transmiten a través de los neurotransmisores y los sistemas hormonal e inmunológicos. Estos desequilibrios sí se mantienen en el tiempo pueden ocasionar trastornos que si no son resueltos derivarán en la enfermedad crónica. Únicamente conociendo y tratando el fondo de cada caso se puede conseguir una curación duradera y natural.  

El conocimiento derivado de las investigaciones en el campo de la física cuántica aplicada a la medicina y del uso de los campos electromagnéticos ha desembocado en el desarrollo de tecnología médica aplicada de última generación. Esta tecnología se encuentra ya disponible para los pacientes como complemento al diagnóstico, obteniendo además un tratamiento individualizado. El uso de esta tecnología es imprescindible que se realice por médicos con experiencia acreditada. En el centro INTHHEALTH® contamos con los últimos avances en este campo. 

La medicina integrativa habla de enfermos, no de enfermedades. ¿Por qué en el ámbito de la salud es tan importante el trato personalizado? 

La relación médico-paciente tiene que ser sincera, relajada, fluida y cercana. El médico necesita contar con toda la información posible y el paciente necesita sentirse acogido, escuchado, entendido. De esta conjunción parte el camino de la sanación del paciente. El tiempo dedicado a la consulta es fundamental. 

Se puede tratar cualquier padecimiento y se obtiene excelentes resultados en la mejoría del paciente desde la primera sesión. 

Los tratamientos que la medicina convencional aplica en las patologías de carácter crónico son paliativos, lo que, sin duda, contribuye a mejorar la calidad de vida del paciente. Sin embargo, la medicina integrativa trata de ir más allá e iniciar un proceso que lleve a la curación real del paciente, a través del apoyo que aporten las terapias complementarias y de la visión holística de esta disciplina. Algunas de ellas son: ansiedad y depresión, artritis reumatoide, fibromialgia, sensibilidad química múltiple, colitis ulcerosa, lumbalgia o insomnio. 

Curiosamente estas claves se conocen desde hace miles de años pero nos hemos desviado de este conocimiento primordial. La dieta, el ejercicio físico y el control de las emociones son los ejes fundamentales: Una dieta saludable en la que predominen la fruta y las verduras y los alimentos provengan de producción ecológica. El mantenimiento de una actividad física habitual de moderada intensidad como la natación, correr, caminar.  Dormir bien tanto en calidad como en cantidad y descansar cuando el cuerpo lo pide. Además de estas bases, tal vez, el elemento más importante y menos trabajado normalmente es el conocimiento de uno mismo y el control de las emociones y del estrés. Como seres humanos debemos aspirar a despertar un estado superior de consciencia desde donde seamos capaces de observar el funcionamiento de nuestro organismo y despertar todo el potencial latente de autorregulación. Desde la autoconciencia se genera sin duda alguna el más alto nivel de salud y bienestar física, mental y espiritual de la persona.